Tomar unos buenos vinos en Calle Laurel o alguno de sus aledaños como Calle San Juan o Travesía Laurel es indispensable si decides conocer Logroño.
A merendar por la calle Laurel
La mítica calle Laurel, asimismo famosa como la «Ruta del Elefante». Por una simple razón, si eres con la capacidad de recorrer sus 60 bares, la calle primordial y las calles aledañas, y tomar vino en todos y cada uno… El resultado va a ser que vas a salir «Trump y a 4 patas». Estos eran nuestros preferidos en Calle Laurel, y en esta web puedes observar todas y cada una de las opciones.
- Taberna del Tío Blas (C/Laurais 1) El primer bar de la calle y entre los bares con mucho más ámbito. Hay una enorme selección de brochetas para escoger. No posee una brocheta particular, pero las hay de todo género, mucho más habituales como las croquetas y mucho más modernas como las mini hamburguesas.
EL ORIGEN COMO COMPORTAMIENTO GASTRONÓMICO
En un comienzo los bares que se instalaban en la calle eran cafeterías que solo ofrecían vino y en ciertos casos porciones de embutido o queso. Desde los años sesenta se han comenzado a vender porciones y pinchos, y a través de un convenio no escrito, cada bar empezó a especializarse en uno o 2 géneros de tapas, lo que incentivaba, y aún lo realiza, a los visitantes a ir de un bar a otro. agregando lo mucho más característico al ubicación. Un ejercicio que llena de bullicio la calle y sus aledaños, con el respeto de los turistas, que se abren paso andando de un bar a otro, leyendo su atractiva pizarra donde van llamando sus tapas, y comiéndolas parado frecuentemente, habitualmente aceptados. en barriles en exactamente la misma calle.
La noche y más que nada el objetivo de semana da una imagen nueva. La calle se transforma en un espacio común de jolgorio que forma un espectáculo indispensable en sí si se visita La Rioja, tal como la expresión mucho más clara de la gastronomía como actividad popular, cultural y festiva.
Bar Charly. Morro de cerdo frito.
Al lado de los 2 primeros podemos encontrar Bar Charly. Con treinta años de actividad a sus espaldas, la oferta es mucho más gran que el ambiente y asimismo hay una pequeña salón donde tenemos la posibilidad de gozar de un instante de calma.
Bonito encebollado, pimientos rellenos de carne y tigres (croquetas de mejillones servidas en su concha) son ciertas de sus especialidades. pero es indudablemente el morro de cerdo frito en salazón gruesa, crocante por fuera y esponjoso por la parte interior, lo que pone a este sitio en el mapa de las grapas de «la Laurel».
Historia
El nombre de esta calle es extraño y varios de los logroñeses que la frecuentan hoy en día ignoran el origen del nombre, puesto que el nombre procede del siglo XVI. .
Inicialmente, en esta calle se situaban las iglesias de San Blas, lote donde el día de hoy se encontraba la Plaza de Abastos, y San Pedro de los Lírios, de ahí el nombre medieval de «Vecindario de San Pedro». , nombre que no se mantiene en el nomenclátor de calles de Logroño.
NOS VAMOS DE TAPAS A LOGROÑO
Te sugiero que comiences la ruta justo al comienzo de la conocida Calle Laurel, indudablemente la bandera del tapeo en Logroño.