Es un debate que casi todos los amantes del vino han compartido alguna vez durante la cena: ¿realmente engorda una copa de tu cosecha favorita? Si te encanta el vino, puede que te preguntes cómo influye tu indulgencia nocturna en tu cintura. La respuesta breve es: sí, puede. Pero las razones pueden ser más complejas de lo que crees.
Alcohol y calorías
En el centro del debate se encuentran las calorías y el alcohol. Por regla general, el alcohol es rico en calorías, con 7 calorías por gramo, quedando en segundo lugar después de la grasa, que ofrece 9 calorías por gramo.
En comparación, los hidratos de carbono sólo tienen 4 calorías por gramo.
Esto significa que una botella media de vino, de 12,5 lcohol en volumen, contiene unas 500 kcal, lo que supone casi el 25% de la ingesta calórica diaria de una persona media, lo que significa que un par de copas podrían llevarte por encima de tu cantidad diaria recomendada.
Carbohidratos, azúcares y acidez
Cuando se trata del vino y el aumento de peso, hay que tener en cuenta otros elementos aparte del alcohol. Los hidratos de carbono de la bebida también se sumarán al recuento de calorías, lo que dará lugar a una ingesta de azúcar que podría provocar un aumento de peso.
Según el tipo y el nivel de dulzor, este azúcar también puede provocar un pico de insulina, haciendo que el cuerpo deje de quemar grasas y pase a almacenarlas.
Además, sobre todo en los vinos tintos y espumosos, su alto contenido en ácido puede ralentizar el proceso digestivo, lo que significa que es más probable que acabes con el estómago agrio e indigestión.
Diferentes tipos de vino
En cuanto a los diferentes tipos de vino, el tipo que elijas también puede marcar la diferencia.
En general, los vinos secos y bajos en calorías, como los tintos y los blancos, pueden ser una buena opción y contener entre 2 y 4 g por litro; sin embargo, los vinos más dulces, como el oporto, el jerez y el Late Harvest, pueden contener hasta 220 g de azúcar y ser mucho más calóricos.
Beneficios del vino para la salud
Una copa de vino, como cualquier otro tipo de alimento, puede disfrutarse con moderación como parte de una dieta equilibrada.
A pesar del recuento de calorías, el vino también puede tener algunos beneficios para la salud, ya que los estudios han sugerido que el consumo de cantidades moderadas de alcohol puede reducir el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares.
El consumo moderado de alcohol también se ha relacionado con un mayor consumo de energía, gracias al aumento de energía que puede proporcionar el alcohol, ya que el vino tinto contiene los potentes antioxidantes resveratrol, que pueden aumentar el ritmo del metabolismo.
Cuándo una copa de vino se convierte en un problema
Aunque beber con moderación puede ofrecer algunos beneficios para la salud, como un menor riesgo de enfermedades cardiovasculares y un aumento del metabolismo, es importante recordar que un exceso de vino puede provocar problemas de salud a largo plazo, así como un aumento de peso.
El consumo excesivo de alcohol puede ser perjudicial para el corazón, el hígado, el páncreas y, en casos extremos, beber en exceso puede incluso aumentar el riesgo de muerte.
El abuso de alcohol también puede provocar un aumento de peso a largo plazo, por lo que es esencial recordar que beber de forma responsable es clave para mantenerse en forma.
Si el vino sin alcohol te engorda, ¿cuál escoges?
Aquí tienes todos nuestros vinos sin alcohol, comunmente el vino se evalúa según el género de uva con la que se prepara.
Por norma general, los vinos sin alcohol se tienen la posibilidad de clasificar en tres categorías según su color: blancos, tintos y rosados. Y con gas si tienen gas.
El vino sin alcohol, en alguno de sus variedades, no engorda.
Los vinos blancos desalcoholizados tienden a ser vinos jóvenes rápidos elaborados con diversos tipos de uvas verdes sin piel.
Un vino blanco gallego sin alcohol elaborado con uvas Airén y Albariño que le proporcionan un tono amarillo claro y refulgente, como el Zero Zero.
El vino sin alcohol Natureo está elaborado con moscatel de Alejandría y se encuentra dentro de los vinos blancos desalcoholizados mucho más conocidos de todo el mundo.
¿Cuántas calorías hay en una copa de vino?
Estos datos no son precisos, es dependiente de varios componentes.
La uva, el tiempo de maduración, etcétera.
Los vinos tienen hidratos de carbono, que entran en el vino con apariencia de azúcares de las uvas que quedan tras la fermentación.
Los productores de vino llaman a este azúcar residual azúcar natural (RS). Las calorías promedio acostumbran a estar entre 110 y 180 calorías por vaso.
Termogénesis y vino
Pese a la calorías del vino, dado que subamos o no de peso va a depender en buena medida de la manera en que nuestro cuerpo las absorba.
Este desarrollo, llamado termogénesis, va a ser diferente en dependencia del metabolismo de cada individuo, tal como de la hora del día en que se gaste el vino.
La termogénesis deja que el cuerpo gaste calorías de manera rápida, antes que se amontonen en el cuerpo y se transformen en grasa.
La termogénesis marcha de forma diferente según el género de macronutriente, por poner un ejemplo, las proteínas se absorben el doble de veloz que los hidratos de carbono y, por ende, se convierten en energía mucho más veloz.
Tomar alcohol te aumenta el apetito
Para muchas personas tiende a ser un snack en el momento en que tomas, pero ¿te has fijado exactamente en qué género de snacks comes?
Seguramente es un snack que puede sacar la fiera hambrienta que llevas dentro.
En el momento en que tomas alcohol tus escenarios de azúcar en la sangre están fuera de control, con lo que tu apetito incrementa.
Como si no fuera suficiente, esta bebida relaja el sistema inquieto central, lo que provoca que el control de la ingesta se descontrole, con lo que vas a tener mucha apetito, pero no vas a poder ser siendo consciente de lo que andas ingiriendo.
Conclusión: ¿el vino engorda?
Para concluir, una copa de vino de vez en cuando no debería tener ningún efecto en tu cintura.
Es cuando te excedes en el consumo de vino y no lo equilibras con un estilo de vida saludable cuando el recuento de calorías empieza a aumentar y las implicaciones de esto se vuelven más serias.
Aunque es comprensible que lo disfrutes, la moderación es la clave para garantizar que tu estilo de vida y tu dieta sigan por el buen camino.
Así que ya lo tienes: comprender las implicaciones de una botella de vino llena de calorías puede ayudarte a tomar mejores decisiones a la hora de mantenerte sano y cuidar de tu cuerpo.
Recuerda: ¡una copa cada vez!